En el mes de Febrero el servicio de correos es inundado con correspondencia. Tanto hombres como mujeres envían tarjetas del Día de San Valentín al amor de sus vidas. Trata de imaginarte la confusión que habría si cada persona de alguna manera recibe el sobre equivocado, y leen las palabras que van dirigidas a la pareja de alguien mas. Seria aun peor si esos lectores intentaran actuar en base al mensaje equivocado. ¡Válgame Dios!
Muy pronto TLTF va a publicar nuestro video de 5 horas y media, Los Tiempos Finales, y recibirás un correo electrónico con detalles acerca de cómo ordenar su copia. Por solo $39 (3 por $100 para que pueda dar copias de regalo), recibirás una exposición de verdad bíblica que muy pocos Cristianos han recibido como enseñanza en los 2000 años de la historia de la Iglesia. QUE partes de la Biblia han sido escritas A QUIEN (Judíos, Gentiles, Cristianos) Es la clave más grande que conozco para “usar bien” el magnífico mensaje de Dios a la humanidad y para vivir la clase de vida por la cual Jesucristo murió para hacerla disponible.
Hoy, la mayoría de los Cristianos están leyendo la correspondencia de alguien mas (Mayormente la de Israel), y esto ha llevado a una constante confusión en la Iglesia acerca de muchos tópicos bíblicos vitales, uno de los más importantes es la salvación. Las únicas personas para quien fue, es, o será, la salvación garantizada durante sus vidas son para aquellos que han “renacido de simiente incorruptible” desde el Día de Pentecostés registrado en Hechos 2. Por tanto, cada parte de la Biblia escrita para y/o acerca de personas que vivieron en otro tiempo, pasado o futuro, habla de salvación condicional que puede ser perdida.
El asalto incansable de Satanás a la verdad vital para quien ha sido escrita, está enfocado en privar a los Cristianos de saber quiénes son en Cristo y lo que pueden hacer debido a quienes son. ¿Cuántos santos sinceros están estancados en alguna parte del Antiguo Testamento, los Cuatro Evangelios, o el libro del Apocalipsis, pensando que lo que leen allí está escrito para ellos hoy, cuando en su lugar pudieran estar ojeando las Epístolas (Romanos a Tesalonicenses) y deleitarse en quienes son como miembros del Cuerpo de Cristo, completamente equipados para llevar con gozo su responsabilidad de representar el corazón de Jesús al mundo?
Todas estas tremendas verdades y muchas más, son presentadas al detalle en Los Tiempos Finales, pero veamos brevemente una de las cosas que más me molestan, y es el uso de la palabra “Reino” en una manera descaradamente fortuita. Innumerables ministros y maestros Cristianos usan esta palabra como si correspondiera hoy a nosotros, por ejemplo “Debemos promover el reino”, “Estamos trayendo gente al reino”, “El reino esta en ti”, etc. principalmente entre los que promueven este error son aquellos que creen lo que se conoce como “El Reino Ahora” o la teología del “Dominionismo”, la cual esencialmente dice que la Iglesia ha asimilado las promesas de Dios a Israel y básicamente va a gobernar al mundo. Considere este extracto como parte de una publicación, la cual está absolutamente falta de algún tipo de entendimiento de las administraciones en la Escritura.
“Nosotros servimos aun Rey quien está promoviendo un Reino. El Rey ha escogido posicionar Su Reino dentro de la humanidad. El envía a todos los aspectos de la cultura social a aquellos quienes tienen Su Reino dentro de ellos. El Reino de Dios está aquí ahora”
Y en el tiempo de la Navidad, la mayoría de los Cristianos cantan entusiasmadamente las palabras del clásico himno en Ingles Joy To The World (Alegría en el mundo), pero ¿están ellos bíblicamente correctos? Considere estos conocidos extractos:
¡Alegría al mundo, el Señor ha venido!
Dejen que la tierra reciba a su Rey;
Dejen que cada corazón le prepare habitación…
¡Alegría al mundo, el Salvador reina!…
No dejen que los pecados y sufrimientos crezcan,
Ni tampoco que las espinas infesten la tierra;
Él viene a hacer que sus bendiciones vuelen lejos a medida que las maldiciones aparecen…
El rige al mundo con verdad y gracia,
Y hace que las naciones confirmen las glorias de su justicia y las maravillas de Su amor…”
QUEEEE? ¿Esas palabras describen el mundo que usted ve hoy a su alrededor? Claro que no, el lugar es una locura, y la maldad es creciente. Pero ellos si describen el reino profetizado en una buena parte desde Isaías hasta Malaquías. Por definición, no puede haber un “rei-no”, sin un REY, y cuando Jesús venga de nuevo a la tierra (con nosotros) a salvar a Israel, las cosas van a funcionar mejor que la primera vez cuando Él vino a la tierra como la Oveja de Dios a salvar a Israel, y lo mataron. Él va a venir como el León de Judá, a levantar de los muertos a todos los creyentes del Antiguo Testamento y a hacer de Israel la corona de joyas de una tierra renovada. Cuando vemos “reino”, debemos pensar en Israel, y no la Iglesia. Entonces ¿como Dios usa la palabra “reino”?
Desde los tiempos del Rey David, Dios comenzó a dar a conocer la verdad de que el Mesías, descendiente de David, era el verdadero Rey de Israel. Salmo 2 (Isa. 9:6ss; Dan. 2:44, y otros) amplía esa verdad y muestra que él será rey del mundo después de que venga a la tierra nuevamente y eche a aquellos que se rebelen en contra de él. [Para estudio adicional sobre este tema, escuche nuestra enseñanza de audio en ingles The True Lover of Your Soul, la cual está disponible en nuestra web]. Otros versículos en el Antiguo Testamento muestran que esto es después del “tiempo de angustia para Jacob” (Jer. 30:7-RV60), es decir, los siete años de Tribulación, cuando el que ahora conocemos como Jesucristo regresa a la tierra a salvar a Israel (Zac. 14:3 y 4) y gobierne al mundo por 1000 años desde la tierra que Dios originalmente prometió a Abraham y a sus descendientes creyentes.
Cuando el agente de relaciones públicas de Jesús, Juan el Bautista, apareció, ¿qué le dijo a la gente de Israel? “Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos está cerca” (Mat. 3:2) Poco después, Jesús repitió ese mensaje (Mat. 4:17) ¿Que quisieron decir? Por supuesto que se estaban refiriendo al reino que todos los Judíos conocían de las Escrituras Hebreas (Nadie pregunto, “Que reino”) aquel que el Dios del cielo hará realidad- en la tierra. Cuando ellos dijeron el reino “está cerca”, ellos se referían a que el rey profetizado estaba finalmente aquí. Triste es decir que sus palabras cayeron en los oídos sordos de los Judíos, y, motivados por “los príncipes de esta edad” (1 Cor. 2:8 RVA), Israel asesino a su rey.
Jesús predico “…las buenas nuevas del reino…” (Mat. 9:35; Luc. 4:43) y, debido a que él no tenía conocimiento del “Secreto” (actualmente cerca de un paréntesis de 2000 años en medio del programa de Dios para Israel), él esperaba ser inaugurado como el rey siete anos después que el resucitara de la muerte y ascendiera a la mano derecha de Dios. Por eso fue que él dijo cosas como, “Les aseguro que algunos de los aquí presentes no sufrirán la muerte sin antes haber visto al Hijo del hombre llegar en su reino.” (Mat. 16:28). Si usted quiere una exposición minuciosa de esta verdad poco-conocida, haga clic aquí para leer ¿Qué Sabía Jesús y Cuándo lo Supo?
Ahora considere estos versículos, tomando en cuenta que Jesús estaba hablando a los Judíos, quienes cuyo marco de referencia era de Génesis a Malaquías.
Hechos 1:3 (LBLA)
(3) A éstos también, después de su padecimiento, se presentó vivo con muchas pruebas convincentes, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles de lo concerniente al reino de Dios.
(4) Y reuniéndolos, les mandó que no salieran de Jerusalén, sino que esperaran la promesa del Padre: La cual, les dijo, oísteis de mí;
(5) pues Juan bautizó con agua, pero vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de pocos días.
(6) Entonces los que estaban reunidos, le preguntaban, diciendo: Señor, ¿restaurarás en este tiempo el reino a Israel?
(7) Y El les dijo: No os corresponde a vosotros saber los tiempos ni las épocas que el Padre ha fijado con su propia autoridad;
(8) pero recibiréis poder cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros; y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.
Como Judíos, sus discípulos pensaron inmediatamente en las profecías del Antiguo Testamento sobre la gloria futura de Israel, y le preguntaron a Jesús si eso era lo que él quiso decir. Su respuesta indico que “los tiempos ni las épocas” planteados en el Antiguo Testamento, de los cuales él hablo en los Cuatro Evangelios, son acerca del itinerario futuro de Dios para Israel, y no tiene nada que ver con la Iglesia. No hay “señales” que precedan al “rapto” de la Iglesia, hay señales durante la Tribulación para ayudar a aquellos asediados creyentes Judíos a “perseverar hasta el fin” y por lo tanto mantener su salvación condicional (Mat. 24:13).
El espíritu santo que Dios prometió en las Escrituras Hebreas era lo que avivaría los cuerpos resucitados de los verdaderos creyentes de Israel (Ezeq. 37:11-14, y otros). Nosotros como Cristianos tenemos ahora “…las primicias del Espíritu [espíritu]…” (Rom. 8:23) en “vasijas de barro”. Después de su resurrección, Jesús aparentemente sabia mas de esto que antes de morir, y el comenzó a decirle a sus discípulos Judios acerca de un “nuevo acuerdo” que era diferente del verdadero Reino revelado en el Antiguo Testamento.
Hay solo otros seis usos de la palabra “reino” en el libro de Hechos, el lapso de tiempo en que el Señor Jesús fue revelando progresivamente “el Secreto” a Pablo, y después a otros “santos apóstoles y profetas” (Efe. 3:5) quienes lo transmitieron al creciente Cuerpo de Cristo, quienes la mayoría habían sido Judíos. Ninguno de ellos indica que Jesús se había convertido tanto “Rey de la Iglesia” como rey del mundo. En sus Epístolas a la Iglesia reveladas a Pablo, el Señor Jesús uso la palabra “reino” solo 13 veces, usualmente con una visión hacia el Paraíso restaurado en donde ambos Cristianos y creyentes del Antiguo Testamento/Tribulación habitaran con él (Rom. 14:17; 1 Cor. 4:20, 6:9s, 15:24; Gal. 5:21; Efe. 5:5; Col. 1:13, 4:11; 1 Tes. 2:12; 2 Tes. 1:5; 2 Tim. 4:1, 18).
Si, vivir en la tierra renovada en un cuerpo nuevo durante el Reino Milenario de Cristo es parte de nuestra esperanza, pero los Cristianos no van a llegar ahí por soportar “la ira venidera”, esto es los horrores de la Tribulación. Nosotros seremos reunidos por el Señor antes de eso. El “paréntesis” de “el Secreto” (de Pentecostés al Rapto) llegara a un final y el programa de Dios para Israel, por ahora inactivo, continuará. Nosotros regresaremos a la tierra con el Señor para ayudarlo a vencer a los malvados y a implementar su glorioso reino por 1000 anos, después del cual el creara un nuevo cielo y una nueva tierra, y todos nosotros viviremos alegremente por siempre. Amén.
Todas estas verdades, y más, son publicadas en la clase Los Tiempos Finales. Si le gusta, ¿por qué no invita a cuanta gente le sea posible para que en un fin de semana vean la clase con usted? Usted lo puede hacer fácilmente en un Sábado/Domingo, dígale a sus amigos que contribuyan con comida y haga de este encuentro un momento maravilloso para compartir y aprender. Quién sabe, quizás pueda generar interés en todos ustedes para que se reúnan regularmente y se interesen en la Palabra y crezcan juntos. ¿Puede decir “comunión’? Seguro que puede.
Los amo.
